Este blog, que tiene como título mercadotecnia alternativa tiene 15 años de existencia.
En ese tiempo sólo he definido una vez el concepto que tuvo su origen por esas fechas.
He visto incluso algunas materias de mercadotecnia alternativa en algunos programas de estudio, pero estoy casi seguro que no tratan el tema como fue concebido en este espacio hace años.
Cuando lo definí pensé en que si debía registrarlo como una propiedad intelectual, pero recordé el caso de Guerrilla Marketing, un interesante concepto que no se puede usar porque tiene derechos de autor. Y el concepto aunque es poderoso porque habla de una lucha de posiciones y de golpes en lugares estratégicos hasta colapsar un sistema es imposible de tratar por este problema legal.
Además la superficialidad y el manoseo llevo a este concepto a una especie de Street marketing (marketing en la calle) que sólo narra un pequeño quehacer de lo que podría ser la guerrilla de mercadotecnia. Su función podría ser más estratégica, con perspectiva y objetivos definidos, pero no ocurrió.
Bajo este marco pensé que no debía de registrar los derechos de marca ni de autor de este concepto, me habría gustado que se convirtiera en una herramienta de uso común, pero no ocurrió, en parte porque no desarrollé una teoría que la respaldará (pensé que ya todo estaba hecho) en parte también porque los autores de países no dominantes tenemos poca, muy poco credibilidad, en especial si no se buscan los espacios que premia la ideología dominante.
No lo hice, ni lo haré. Esta aquí el concepto, ahora más explicado, recordando un poco los tiempos en los que me apasione con su antecedente la comunicación alternativa.
Pasado el tiempo, me doy cuenta que soy más un comunicador que un mercadólogo, aunque en mi caso ambos roles son difíciles de separar, porque la mercadotecnia es también un proceso de comunicación bajo reglas específicas empresariales que la hacen muy apasionante cuando se trata de buscar nichos de mercado que permitan la emergencia y crecimiento de empresas diferentes que usen herramientas diferentes también.
Hace un tiempo que dejé de hablar de mercadotecnia, cuando técnicas de captación de información como las que usó Cambrigde Analytics me hizo sentir que el marketing estaba acabando con las relaciones interpersonales, con las relaciones sociales, con la vida saludable y con la intimidad de las personas.
Pero el despertar de la sociedad mexicana con el movimiento encabezado por AMLO me movió las esperanzas y me recordó que a pesar de cualquier herramienta persuasiva el hombres nunca tendrá un pensamiento homogéneo y unívoco, siempre habrá puntos de vista, diferencias de opinión, porque no somos autómatas, somos seres únicos.
Y en esas diferencias personales está la semilla de la transformación, el crecimiento, la duda y la búsqueda del conocimiento.
Ahora me siento más reconciliado con el pasado, no sabemos cuanto dure esta ventana de libertad, pero hay que usarla.
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