El experto en Neurociencias, Michael Gazzaniga, pone en
claro un aspecto de las decisiones que atañe tanto a mercadólogos, publicistas
como políticos: el cerebro toma las decisiones en automático, tiempo antes de
que nosotros tengamos conciencia de ello, pero esto no le quita al individuo ni
responsabilidad, ni libertad
La automaticidad del cerebro es necesaria para que no tengamos
que enredarnos en decisiones para que nuestra conciencia no tenga que organizar
actividades como movernos, hablar, los movimientos necesarios para subir una
escalera o escribir con varios de dedos en el teclado de una computadora
Pero estas decisiones automáticas se enfrentan a la
coexistencia con nuestros semejantes:
“La responsabilidad surge como un contrato social. Si usted
es la única persona del mundo, la idea de responsabilidad no tiene mucho
sentido. Pero ponga a dos y querrán establecer algunas reglas. Y si pone a siete
mil millones, tendrá que regirse por leyes. Esa característica de cualquier
red, sea social o virtual, como la Internet, exige que no se haga trampa,
porque si no el sistema no funciona”.
Otro aspecto que señala este artículo es el “interprete” o
una cualidad que tenemos los seres humanos de recrear la realidad a partir de
segmentos de la misma, lo cual nos ayuda a prepararnos para enfrentarnos a ella
posteriormente, cualidad que tiene que ver con la ficción, la creación de
historias y el arte, actividades humanas que nos otorgan una ventaja evolutiva.
Ambas conclusiones mueven a la reflexión a otras actividades
como la mercadotecnia, pues está claro que el ser humano toma decisiones
básicas en automático, pero estas se verán controladas al insertarse en un
ámbito social, nada nuevo al fin de cuentas, pero relevante para no olvidarlo
Destaca también la función del intérprete, una cualidad que
nos ayuda a movernos en el futuro y que explica porque la importancia de narrar
buenas historias en la mercadotecnia.
La entrevista realizada por Nora Bär a Gazzinga es bastante
buena, la puedes consultar aquí
Comentarios