El empresario libre

El autoempleo no es necesariamente un negocio. Es una trampa creer que se tiene una empresa cuando sólo se obtienen ingresos para subsistir y sobre todo se tiene que trabajar diariamente para que la compañía esté funcionando

Parece que a Andrés Sada, que afirma lo anterior, si le gira la neurona, pues además da otros consejos interesantes a los empresarios que inician, planteados como errores: no saber en qué negocio o industria estás, no identificar el mercado potencial, usar publicidad institucional, no tener un plan de mercadotecnia bien establecido y no estar en constante innovación.

Aunque la verdad es que hay muchos empresarios que han iniciado su negocio sin seguir estos consejos y de todas formas han sabido no solo permanecer en el mercado, si no que crecen. Hay empresas que permanecen sin innovación por decenas de años (Copidux, por ejemplo) y continúa existiendo.

Los consejeros empresariales podrían decir, que esto es cosa del pasado y que la mejor muestra de que esos modelos ya no funcionan es que esta empresa ha dejado de lucir lo que era y subsiste sólo porque aun hay algunas empresas que continúan consumiendo papel carbón. Puede ser que sea así, pero la inversión original dio para varias generaciones y aun sigue generando dinero.

Al final de cuentas ser empresario es sinónimo de ser creativo, las opciones son diversas y en realidad las reglas del negocio se reescriben todos los días, propiciadas por las mismas prácticas de los propios empresarios que tienen éxito. La teoría va atrás de los empresarios, por ello para ser empresario se requiere de cierta dosis de audacia, persistencia y sobre todo un anhelo primordial de libertad.

Por esto el ser autoempleado, aunque se tenga un negocio de cientos de empleados, no se es totalmente empresario, porque se sigue trabajando para alguien, aunque sea para sí mismo.

Comentarios

Cerebro dijo…
Me gustó tu artículo. Dices muchas cosas ciertas. Y a fín de cuentas todos los que tenemos nuestro propio negocio seguimos siendo como empleados. Nada más que en lugar de tener un jefe tenemos muchos. Uno por cada proyecto
Hola Cerebro

Gracias por tu comentario. La gran ironía en ete tema es que entre más jefes tengas, menos dependerás de cada uno de ellos, lo que en cierto sentido te hará más libre.