Marcas personales en un mundo de incrédulos

Si para el mundo actual globalizado el manejo de la imagen personal como una marca es importante, para el mundo "no desarrollado" de los países latinoamericanos es urgente. ¿Cuántos latinoamericanos conoce que sea un marca reconocida y respetada mundialmente, como lo son la marcas Coronoa o Bacardi? Quizá los que podrían salir mejor librados sean los artistas prestigiados como García Márquez, Carlos Fuentes, José Luis Cuevas y muchos más que si han logrado posicionarse con éxito. Pero de ahí la lista cae, salvo algunos actores y actrices, no hay mucho más. Ni deportistas, ni políticos, ni mucho menos gurúes de negocios o de mercadotecnia sobreviven a una mínima evaluación de su imagen como marca reconocida y global.

Las razones de esta falta de posicionamiento de nuestros líderes latinoamericanos, por supuesto, no se explican por un mal manejo de las herramientas de mercadotecnia. Es mucho más profundo y complejo. Pero más allá de las causas, están las soluciones y éstas sí que son un reto, pues por más bien que se haga la tarea y se pulan una a una con cuidado y esmero todas las características necesarias para tener una buena marca personal, hay una que parece insalvable: la falta de credibilidad en nosotros mismos.

Si usted va a un evento de negocios y a la misma hora puede asistir a una conferencia con un gurú norteamericano o a otra de un mexicano para escucharlos hablar de los retos de las PyMEs en el mundo globalizado ¿a cuál asistiría? Mi experiencia en algunos eventos en los que he tenido oportunidad de participar en su organización o a los que he simplemente asistido es que el americano, particularmente si es promovido como "gurú" se llevaría de calle al mexicano...a menos que -y este es un punto determinante- el mexicano haya logrado construir una marca personal fuerte.

Como publico, es decir, como masa, generalmente somos malinchistas, pero no tontos. Si sabemos que el tema podría ser manejado mejor por un conferencista mexicano porque el tema es básicamente local, y la imagen de este conferencista es reconocida, tampoco hay duda, tendrá éxito. El problema es encontrar conferencistas mexicanos reconocidos. Generalmente no hay muchos y los existen han recorrido un largo camino para obtenerlo. El esfuerzo ha sido para ellos doble o triple comparado con un par suyo pero de un país desarrollado.

Difícil entonces, pero no imposible. Para lograr posicionar su marca, un latinoamericano tendrá que hechar mano no sólo sólo de los mecanismos que ofrecen los expertos en imagen personal, sino también de todos los recursos que ofrece la mercadotecnia alternativa, cuyo papel es precisamente el de dar apoyo por medios no tradicionales a marcas no dominantes pero fuertes. Si quiere empezar o reforzar el cuidado de su imagen como marca personal, le recomiendo lea el artículo "Promueva su marca personal como los expertos" que publicamos en Prestiggio.com

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