Ixtapa contra Zihuatanejo en #México

Por razones ajenas a mi voluntad, viaje a Ixtapa por autobús, Al principio me pareció muy incómodo, pero irónicamente tuve un importante aprendizaje, que no me habría ocurrido si no hubiese viajado así.

La mayoría de los clasemedieros nacionales y los extranjeros llegan a este destino por avión, así que pocos saben que hay dos mundos paralelos. Y no voy a hablar del mal estado de la carretera, que además es de dos carriles, pues se supone que la están ampliando y esto se resolverá pronto

Me refiero a la arquitectura ambiental. Llegar a Ixtapa es llegar a un mundo feliz: calles amplias, construcciones hermosas, vegetación exuberante, restaurantes variados y atractivos. Pero si se va por carretera entrar por Zihuatanejo es como llegar por el patio trasero de alguien que sólo quiere mantener las apariencias. Construcciones deprimentes, negocios con malas fachadas de cemento y colores contaminantes. Pareciera que la mayoría de sus habitantes se empeñaran por hacer de su pequeña ciudad algo realmente feo.

Alguien me podría explicar que es la arquitectura de la pobreza que el ambiente es así porque no se tiene dinero. Pero más bien creo que es algo así como una nueva ola cultural. Mucha gente deja sus varillas de construcción del primer piso al descubierto porque algún día construirán un segundo piso. Otros más no pintan sus paredes porque aun no les ponen recubrimiento. Hay negociaciones de chatarra que delimitan sus espacios con autos oxidados y aplastados. Y otras que terminan cubriendo su reja con los alambres y resortes de lo que algún día fue un colchón. Tenemos un concepto cultural del ahorro en donde no hacemos que nuestro entorno mejore porque sería gastar en algo que después desecharíamos, porque esperamos un futuro mejor, sin darnos cuenta que nuestro presente es bastante deprimente.

Es curioso, si yo describiera una casa rural, una choza pobre en un rincón lejano del país, no se me ocurriría lo que acabo de describir. En mi mente aparece una casa blanca de adobe, techo de paja, piso de tierra pero rodeado de plantas y flores. Tengo la imagen de que las mujeres mexicanas humildes aman la naturaleza, lo verde y el color de las flores. Gallinas y guajolotes con árboles frutales y flores en botes oxidados de metal que se integran de inmediato al ambiente

La civilización nos ha invadido con una fealdad imprevista, con una renuncia a nuestro entorno provinciano -creativo y brillante- prácticamente extinto. No deberíamos de permitirlo. Los expertos en comunicación saben que la imagen pública es importante. Los expertos en psicología saben que el concepto que tenemos de nosotros mismos es fundamental. Entonces mejoremos nuestra imagen. Las ciudades también son formas de comunicación.